Lolita Pluma fue el personaje más célebre de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria durante el siglo XX.
Su figura ha quedado grabada en la memoria de sus vecinos y su recuerdo permanece en una estatua ubicada en el Parque de Santa Catalina, auténtico escenario de su vida.
Mª Dolores Rivero Hernández (1904-1987) cautivó a los ciudadanos y visitantes de Las Palmas de Gran Canaria. Su apodo proviene del mote familiar, pues en su pueblo natal, Arucas, los suyos eran conocidos como Los Plumas.
Parece ser que dolores sufrió un desengaño amoroso que provocó un fuerte seísmo en su vida. A partir de ese momento, su personalidad se desarrolló por los derroteros de la psicosis: murió Dolores y nació Lolita Pluma.
Era fácilmente reconocible por la estrafalaria combinación y el llamativo colorido de su vestimenta. Solía lucir en el pelo lacitos de colores como si de una muñeca se tratara. Sus labios rodeados de un extenso y anárquico carmín. Así la podíamos ver por el Parque de Santa Catalina, con su cesta llena de golosinas y cigarros sueltos para vender, o posando para las fotos de los extranjeros.
Siempre iba acompañada de sus gatos, a los que protegía con el manto de su cobijo.
El cantante Braulio dedicó una canción, a la que puso letra y música, a este entrañable personaje.
El cantante Braulio dedicó una canción, a la que puso letra y música, a este entrañable personaje.
No hay comentarios:
Publicar un comentario