jueves, 21 de marzo de 2013

Toxoplasmosis


Como en todo, sólo es cuestión de SABER la realidad de las cosas, y no dejarse llevar por bulos, leyendas, comentarios y deducciones. Esta enfermedad se ha convertido en uno de los argumentos estrella para deshacerse de los gatos

Consejos para la salud de los animales de compañía: mitos y verdades sobre la toxoplasmosis y los gatos.

 


¿Qué es la toxoplasmosis? 

La toxoplasmosis es una infección ocasionada por un parásito microscópico denominado toxoplasma gondii. Si bien la infección es generalmente una enfermedad leve en personas con sistemas inmunológicos saludables, es peligrosa durante el embarazo ya que, en ocasiones, el parásito puede infectar la placenta y al bebé.
La infección puede ser leve o grave y provocar el nacimiento de un bebé sin vida, problemas estructurales y neurológicos así como otros efectos devastadores. Por suerte, puedes hacer muchas cosas para evitar la infección.




¿Cómo se transmite la toxoplasmosis?

Los expertos creen que alrededor del 50 por ciento de las infecciones de toxoplasmosis se producen por comer carne infectada cruda o poco cocinada. No obstante, también puedes contraer el parásito de otras formas, como por ejemplo, si comer frutas o vegetales frescos contaminados, bebes agua contaminada, o tocas tierra contaminada, arena de la caja de un gato y después te tocas la boca, la nariz o los ojos.

La toxoplasmosis no se puede transmitir de persona a persona, salvo en el caso de la transmisión de madre a hijo durante el embarazo o a través de una transfusión de sangre infectada o de un transplante de un órgano de una persona infectada.

¿Cómo puedo evitar infectarme si tengo un gato en casa?

Aquí tienes algunas pautas que te serán de utilidad si tienes un gato:

Haz que otra persona limpie su caja de arena, y que lo haga a diario. Esto reduce el riesgo de infección porque los ooquistes no son infecciosos las primeras 24 horas después de haber sido excretados. Si no tienes otra alternativa que hacerlo tú misma, utiliza guantes desechables y después lávate bien las manos. Algunos expertos incluso sugieren utilizar una máscara, en caso de que alguna partícula sea transportada por el aire al mover la arena.
Para evitar que tu gato se infecte mientras estás embarazada, aliméntalo con comida especial para gatos o con restos de comida bien cocidos, nunca con carne cruda o poco hecha.
Mantén a tu gato dentro de tu casa, de manera que no cace presas que puedan estar infectadas, como por ejemplo, ratones o pájaros. (De todos modos, recuerda que es posible que el gato atrape un ratón dentro de la casa).
Mantén al gato lejos del mostrador de la cocina y de la mesa en donde comes.



viernes, 1 de marzo de 2013

Gatos de ojos dispares




Tras este curioso nombre se encuentran aquellos gatos que presentan un ojo de cada color, una característica distintiva de ciertos ejemplares, que llama la atención del que la contempla. El color de ojos de estos gatos puede combinar un ojo azul y con otro verde, amarillo o marrón. Esta heterocromía es algo bastante frecuente entre los felinos, aunque no se trata de una condición exclusiva de ellos, puesto que ocurre también en otros animales, e incluso en el ser humano. Los ojos dispares afectan más comúnmente a los ejemplares de color blanco, pero se puede encontrar en un gato de cualquier otro color, siempre que posea el gen de manchas blancas. Se da en ejemplares de distintas razas (Persas, Angoras Turcos, Maine Coon, Bosques de Noruega, etc.) y también en gatos comunes (no es extraño ver gatos mestizos con ojos dispares).
Esta curiosa combinación se produce cuando el gen dominante blanco (que enmascara  los genes de otro color y es el responsable de que el gato sea completamente blanco) o el gen que produce las manchas blancas (que es el responsable del bicolor y el humo) impide a la melanina pigmentar el ojo durante su desarrollo. A pesar de lo que muchos piensan, los gatos con ojos dispares no son sordos, y menos aún sordos del oído del mismo lado que el del ojo azul. La sordera es una tara genética que, cuando aparece, está ligada al gen “W”, responsable del color blanco de los gatos. Es una leyenda aquella que une la sordera con los ojos azules, ya que, en realidad, quien porta la sordera es el gen del color blanco del pelo, no el que rige el color de los ojos. Por esa razón, nos podremos encontrar gatos blancos sordos de ojos azules, verdes, amarillos o dispares.



Los ojos dispares son buscados por los amantes de los felinos y tienen una nomenclatura propia utilizada en las razas juzgadas en clases separadas acorde al color de los ojos. Una cifra, el 63, es la que hace referencia a los ojos dispares, por lo que, por ejemplo, un Maine Coon Blanco, con ojos dispares, se denominaría “MCO w 63”.
Los turcos describen a los gatos de ojos dispares como “regalos de Alá” o "tocados por
Alá". Quizá porque algunos gatitos blancos nacen con marcas de color en su cabeza, las llamadas "marcas de Alá". O tal vez porque Muezza, la gata idolatrada por Mahoma, era un ejemplar blanco de ojos dispares… Según una superstición del pueblo turco, su líder: Mustafa Kemal Atarük (fundador de la república de Turquía), renacerá algún día reencarnándose en un Angora Turco blanco de ojos dispares, uno verde y uno ámbar; estos gatos son reverenciados en Turquía y se conocen con el nombre de Ankara Kedi.

Sin duda, una curiosidad felina que no pasa desapercibida.